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Plantearse la pregunta acerca del sí mismo del formador es romper la omnipotencia, es relativizar el lugar de asimetría de la formación, incluyéndose, implicándose en la relación. Podría decirse, es formarse formando al otro.
En la formación de formadores, es sólo a partir de la reflexión sobre sí mismo que el formador podrá lograr que el otro que está en formación a su vez haga un retorno sobre sí.
Es allí donde la pregunta del profesor Filloux adquiere sentido: ¿no sería la formación un diálogo entre personas que son capaces de realizar un retorno sobre sí mismas?
A lo largo de este libro se irá abordando y profundizando esta idea desde distintas conceptualizaciones.
CLINICA Y FORMACION, INTERSUBJETIVIDAD Y FORMACION
(El retorno sobre sí mismo)
I. Reflexiones sobre el tema
Aclaraciones terminológicas
El sujeto
El reconocimiento de los otros
La noción del Sujeto
Reflexiones acerca de la formación de formadores
II. Cuestiones centrales Interrogantes
Los formadores de base
Las relaciones formador-formado
El trabajo del formador en cuanto a la intersubjetividad
La pasión de formar
La transferencia
III. Intercambio final
He tenido la oportunidad de asistir a distintos seminarios dados por el Prof. Jean Claude Filloux en la Facultad de Filosofía y Letras y en la Universidad de París X, Nanterre. En ellos abordó temáticas diversas, frente a públicos también disímiles. Sin embargo, mi experiencia en estas oportunidades me dejó siempre algo común: la sensación y la certeza de haber captado alguna idea importante, de haber encontrado alguna llave para comprender los problemas complejos de la enseñanza y de la formación. En el seminario que transcribimos en este libro, Jean Claude Filloux relata que su formador Gastón Bachelard decía que si en una clase se logra entender algo, una idea nueva, pequeña pero nueva, la enseñanza tenía sentido. Esta afirmación con carácter de testimonio autobiográfico que el profesor brinda y que Uds. encontrarán al leer estas páginas me hizo pensar en el éxito de su formador, Bachelard, que dejó en él ciertamente la huella del maestro. Esta huella que se aprecia aun hoy en sus clases, puede ser captada y sentida en la propia experiencia durante sus cursos. Se trata en realidad de una relación de formación, de una interacción formadora que se prolonga de un formador en otro, llegando al seminario y es nuestro deseo que también se extienda a este libro.
Me pregunto al presentarlo ¿cuál es esa idea? Al ir recorriendo la trama de estas conferencias el lector encontrará probablemente más de una. Sin embargo, en mí produjo mayor impacto sin duda el concepto de «retorno sobre sí mismo». Retorno que contiene pensamientos, sentimientos, percepciones sobre uno mismo pero que sólo puede hacerse con la mediación del otro. Es en la relación entre sujetos, en la intersubjetividad donde se hace posible volver sobre sí, transformándose, en términos de Hegel, de una «conciencia de sí» en «una conciencia para sí».
Se trata de un proceso a la vez interno y externo al sujeto, que transita entre el mundo interior y el social, entre el adentro y el afuera en una zona que desde Winnicott podríamos caracterizar como espacio transicional, como zona de lo informe. En ella puede surgir una nueva creación, un conocimiento sobre sí mismo desde y a través del otro, de los otros.
Conocimiento que paradojalmente quienes nos dedicamos a la educación y a la formación y por ello al conocimiento a menudo desconocemos.
Pensar sobre uno mismo, sobre la infancia pasada, sobre las inscripciones que deja en el presente, sobre el niño interno que todo sujeto adulto contiene, sobre los deseos inconscientes que nos movilizan, sobre lo que nos lleva a crear, a dar vida, a formar pero también a destruir, a violentar, a ejercer un dominio y un apoderamiento sobre el otro son algunas de las facetas del retorno sobre sí en la relación intersubjetiva.
Preguntarse como formador qué retorna a mí, sobre mí, es reconocer que en el otro me reflejo y que el otro me refleja. Es también algo más: es iniciar la aventura de la búsqueda de uno mismo no desde el narcisismo sino desde la inclusión del otro. Es animarse a conocer-se desde el reconocimiento en el otro. «No hay sujeto sin otro sujeto que lo reconozca como sujeto» nos dice Jean Claude Filloux marcando el lugar de la intersubjetividad en la relación formador-formado, en la lucha por el reconocimiento. No hay sujeto formador sin un trabajo de retorno sobre sí y de facilitación de que el otro -formador en formación en nuestro caso- también retorne sobre sí.
Conocer es aventurarse hacia lo desconocido, ir más allá, sentir incertidumbre, tolerarla, descubrir algo nuevo, interrogar los propios fantasmas. Conocer acerca de uno mismo es cuestionarse; buscar en lo profundo, en los deseos, en las fantasías; abrirse a encontrar aspectos nuevos, zonas de ignorancia, de rechazo, de negación que el reflejo en el otro provoca y muestra.
Plantearse la pregunta acerca del sí mismo del formador es romper la omnipotencia, es relativizar el lugar de asimetría de la formación, incluyéndose, implicándose en la relación. Podría decir es formarse formando al otro.
En la formación de formadores, es sólo a partir de la reflexión sobre sí mismo que el formador podrá lograr que el otro que está en formación a su vez haga un retorno sobre sí. Es allí donde la pregunta del Prof. Filloux adquiere sentido: ¿no sería la formación un diálogo entre personas que son capaces de realizar un retorno sobre sí mismas?
A lo largo de este libro se irá abordando y profundizando desde distintas conceptualizaciones esta idea.
Seguramente, el Prof. Filloux coincidiría en que no sería la práctica discursiva la forma más acertada de transmitir estos conceptos, por el riesgo de generar rechazos y resistencias, pero es por ahora la posible. Es desde prácticas de formación con enfoque clínico que sería más lógico acercarse a estas problemáticas. Quisiéramos acompañar al lector en este camino de búsqueda de significados de la intersubjetividad. Lectura acerca del camino de conocimiento del otro y de sí mismo en la relación de formación que seguramente provocará movimientos en el lector y lo invitará a comprometerse en una nueva búsqueda: la del retorno sobre sí mismo del formador y del formado.
La conferencia sobre Clínica y Formación con la que se inicia este libro plantea cuestiones centrales acerca de esta relación y la esclarece. Permite, por otro lado, comprender el marco en que el trabajo sobre el sí mismo debiera realizarse: el enfoque clínico.
Jean Claude Filloux es Profesor Emérito de la Universidad de París X de la cual fue miembro fundador. Ha dedicado su vida académica al estudio y a la investigación de los problemas de las ciencias humanas y de la formación. Conocido en la Argentina ya a comienzos de la década de los 60 por su libro La personalidad, escribió una gran cantidad de obras en las que muestra su especialización en el enfoque psicoanalítico aplicado a la educación, en los enfoques psicosociológicos y en la sociología durkheiniana en la cual es especialista. Su producción acerca de los pequeños grupos, del grupo clase, del enfoque clínico, y últimamente sobre los derechos del hombre es bien conocida entre nosotros. Es una de las principales personalidades en el mundo que en el campo de las ciencias de la educación ha marcado rumbos, ha abierto caminos para la investigación y ha defendido siempre la importancia y la necesidad de incluir los análisis y lecturas desde enfoques clínicos y desde la teoría psicoanalítica sin renunciar a la especificidad de lo pedagógico.
Marta Souto
Jean Claude Filloux
Título: Intersubjetividad y formación
Subtítulo: El retorno sobre sí mismo
Autor/es:
Jean Claude Filloux
Colección: Formación de formadores
Materias: Formación docente - Psicología educativa